Relación de sitios visitados
La Parrala
Madrid, 27 de Noviembre de 2001 volver al listado
Convocatoria
Irrebatible erudito gastronómico y amigo querido:
A las virtudes denominadas por la Santa Madre Iglesia cardinales (Prudencia, Justicia, Fortaleza, y Templanza) que -me consta- brillan en tu ejecutoria moral en grado heroico, se unen las también por Ella denominadas teologales, a saber: Fe (la que mueve montañas), Esperanza (la que es lo último que se pierde) y Caridad (la que, bien entendida, empieza por uno mismo).
A ésta última quiero hoy referirme pues, como todos los años, nuestra cooperación ha sido requerida para una causa tan noble como es la de proporcionar un techo y un hogar a aquellos infortunados niños que carecen de uno y de otro. Y eso, máomeno, es Caridad.Es así como el martes, día 27 de Noviembre, a las 14,30 horas, celebraremos una sesión degustativa extraordinaria en el chiringuito denominado La Parrala, dentro del Pabellón La Pipa, en las instalaciones municipales de la Casa de Campo. Y todo ello en el marco de El Rastrillo, iniciativa loabilísima dirigida a aquel fin.
Quienes asistieron el pasado año pueden dar fe de la excepcional calidad gastronómica del cocido que nos fue servido (elaborado personalmente por las manitas de las estupendas y generosas señoras que luego nos lo servirán en nuestra mesa). Esa misma será la procedencia fabril del de hogaño.
Tiene un doble valor añadido nuestra celebración: A) Contestar a la beocia Ministra de Sanidad sobre sus peregrinas afirmaciones respecto a los huesos de caña, a los priones, y a la madre que los parió: habrá -puedo asegurarlo y lo aseguro- tuétanos en abundancia para los miembros de este ilustrado Instituto, y B) Ratificar con orgullo, frente a la ola retadora de islamismo que nos invade, nuestra acrisolada cristiandad, se materializará en la ingesta, tan despreocupada como complacida, de las diversas fruslerías porcinas (morcilla, tocino, chorizo et multa altera) que enriquecen el plato de vianda y que, como muestra de vituperio a Osama Bin Laden y a sus dogmáticos talibanes, comeremos con singular delectación y deliberado empecinamiento.
Tu presencia, siempre bienquista, será en esta ocasión doblemente agradecida por razones obvias. (Incluso aunque, como de costumbre, no nos llames para confirmarla o denegarla).
Fdo: Guillermo Piera
Presidente
Valoración